Mi testimonio.

Cuando yo estaba pequeño, me preocupaba mucho, a causa de ver que las personas tenemos que morir. Y decía en mi razonamiento, ¿será que el hombre, es como una hoja que cae de un árbol, que jamás vuelve a ser hoja? y en esa meditación, 

Oí decir, que cuando una persona muere se le hacen velaciones, mizas, y todos los rituales, que hacen los católicos. Yo pensé entonces, voy a pagarle al cura, para que me haga muchas misas, para no irme para el infierno. Y tener la entrada a la gloria. Pero yo no estaba seguro, de que eso fuse cierto. Y pensaba, si alguien vine, y me dice, si uno de tu familia muere; todos los otros vivirán. Yo le digo, mátenme a mí, y los otros que vivan. Porque no tenia, el conocimiento, de Jesucristo, el ya había hecho, lo que yo pesaba hacer. el Señor, murió por toda la humanidad. a la edad de 27 años, me hablaron del evangelio, y acepte, al Señor Jesucristo; como salvador de mi vida, ya tengo 22 años, en el evangelio, y estoy feliz, de vivir aquí, y cuando muera, mi cuerpo ira al cementerio, y mi espíritu, al paraíso, de Dios. a esperar que Jesucristo venga, a levantar su Iglesia. Entonces, resucitare de los muertos, y viviré para siempre con Dios. Yo estoy completamente enamorado de la vida, por eso, amo al Señor Jesucristo, porque el es mi vida. 

Soy, tu amigo, y hermano. Benigno Rodríguez